jueves, 29 de noviembre de 2018

Factor X.



- He de reconocer que este es uno de los pocos shows de telerrealidad que me han mantenido al frente del televisor durante un tiempo. No me gusta el llamado género "Got Talent", pero "Factor X" logró entretenerme por sus peculiares personajes, aunque también hay que reconocer que algunos concursantes eran bastante buenos en lo suyo.

Este concurso existe desde 2007. Durante dos años seguidos fue presentado por Nuria Roca y no reapareció hasta una década después. "Factor X" ha sido basado por el pionero británico "The X Factor", pero no solo España siguió a los ingleses en su afán por entretener al espectador. Italia, Australia, Bélgica, Estados Unidos, Rusia y Chile son otros países que buscan la X, y en la mayoría de ellos el programa ha triunfado notablemente.

Jesús Vázquez fue el presentador de Factor X  2018.
- Yo empecé a verlo en 2018, es decir, en su tercera edición. Jesús Vázquez es el presentador del concurso, al que le sigue un jurado formado por Laura Pausini, Risto Mejide, Fernando Montesinos y Xavi Martínez. Anteriormente el jurado fue cosa de tres, y Jorge Flo, Eva Perales y Miqui Puig hicieron la difícil tarea de calificar a los diferentes concursantes que pasaron por Factor X en sus primeras andanzas.
Tanto Cuatro (en los inicios) como Tele 5 ganaron gran audiencia gracias a este Reality Show, pero fue en la última edición cuando más éxito tuvo.
Explicar el éxito de la última edición es bien sencillo. Además de contar con un gran presentador como Jesús Vázquez, el concurso contó con la presencia de un buen jurado. A los Xavi y Fernando hay que unirles la notable presencia de una maravillosa cantante como Laura Pausini. No hay que olvidarse de Risto, el mejor condimento para este tipo de salsas en los que el jurado se convierte en malo a la hora de calificar. El papel de Risto en F-X es como el del abuelito de Heidi, ya que el tío de vez en cuando es capaz de sacar una sonrisa para que la gente no le odie en demasía.

El mecanismo del programa es sencillo y ameno. Yo creo que la mejor parte es la de las audiciones, en la que descubrimos cada friki que asusta. Ahora me viene a la cabeza ese tal Fernando cuya obra musical se llamaba "Poesía para monstruos". Este informático nos deleitaba con un temazo satánico que causó las mayores risas de Factor X, y no es para menos.

Pero también vimos frikis que sorprendieron, y eso mismo ocurrió con La Pili y Jirafa Rey. Esta pareja, chica y chico respectivamente, nos sorprendió con dos espectaculares temas como "Cómeme el donut" y "Muslona". Tanto la letra como el ritmo de sus canciones no tenía desperdicio alguno.

Un largo etcétera de concursantes aparecen entre las audiencias y las galas de "las sillas"y los directos. Algunos cantantes sorprenden, otros aburren, unos entusiasman y otros son simplemente aborrecidos por todos, pero eso pasa en todos los concursos de este tipo.

Tener la "X" era la misión de todos los participantes, y cada parte del jurado entrenaba a cuatro personas o grupos con el único objetivo de llevarles a la cima. En 2018 lo consiguió Pol Granch, como en anteriores ediciones lo lograron María Villalón y Vocal Tempo.
No hay duda de que de este programa saldrán grandes talentos. En él hemos conocido diversos cantantes, dúos, tríos y grupos que han entusiasmado al público: Angy Fernández, Élanis, United, W Caps, Evelyn Evangelisti, Fusa Nocta y Ailyn, entre muchos otros, han ido sorprendiendo al público en las tres ediciones de Factor X.

No sabemos si habrá más ediciones de Factor X o si tendremos que esperar otros diez años para ver una edición tan buena como la de 2018, y mira que es complicado que esta clase de programas gusten... al menos a mi.

La Pili y Jirafa Rey despertó la atención de los grandes seguidores de Factor X en su última edición. 

- Sé que no soy muy fan de este tipo de contenidos televisivos, y espero que muchos de los que os gustan los reality shows entendáis mi postura. Aún así se debe valorar como positiva mi visión mejorada por este tipo de programas, ya que con Factor X cambió un poquito.

Con sólo ver mi valoración con respecto a este concurso os demuestro que todo ser viviente puede cambiar. Ahora, y si no os importa demasiado, me voy a vestir de Risto Mejide para ofrecer mi valoración sobre el espectáculo de la X:


miércoles, 28 de noviembre de 2018

Wild Frank.



- Esta es la versión modernizada de "El hombre y la tierra" pero con un gran toque de humor. Gran gala de ese humor la hace Francisco Javier Cuesta Ramos, más conocido como "Frank Cuesta". Este retirado tenista leonés ya ha participado en otros documentales sobre naturaleza como "Frank de la jungla", "La selva en casa" o "Natural Frank".

Una vez dejado el tenis también como entrenador, el osado y aventurero Frank concluyó sus estudios de veterinaria y se especializó en herpetología, lo que le abriría muchas puertas de cara al futuro. Parece que al leonés no le hacía mucha gracia ser protagonista televisivo (algo que cuesta creer), pero convencido por su señora esposa, el ex-tenista se lanzaría en sus primeras aventuras para la pequeña pantalla hasta que surgió "Wild Frank" en mayo de 2014, programa salvaje del que os voy a hablar hoy.

Frank nos sorprende con su hortera indumentaria. 
- Wild Frank parte como idea de la productora "Molinos de Papel", siendo Frank Cuesta la estelar figura que nos descubre parajes asombrosos por el mundo, a la vez que conocemos casi tan de cerca como él a las diferentes especies que se va encontrando en sus interesantes misiones.
No es un documental como otro cualquiera, ya que el humor que aporta el presentador español hace que éste sea muy entretenido. Frank se enfrenta a los retos de la naturaleza con una forma de vestir bastante peculiar, a la vez que hortera. Ahí está la gracia. Le vemos caminar con su caña de bambú como apoyo, una visera del revés, camiseta blanca, pantalón corto y sus zuecos de goma con calcetines. Acostumbrado a ver mundo, nuestro protagonista viaja a diferentes países del mundo, visitando los continentes de África, Asia, América, Australia o Europa. En todos los sitios que aterriza, Frank nos descubre la naturaleza tal y como es, y no solo sabe de animales, claro está. Con un alto grado de humor nos presenta a una gran cantidades de animales existentes en la tierra: conejos, tigres, leones, focas, pingüinos, hipopótamos, mofetas, ardillas, búfalos, linces, armadillos... Toda clase de animal será tratado por Frank Cuesta, quien a su vez nos explica la forma de actuar de sus queridos y salvajes amigos.

Y es que la serie se llama "Wild", que en inglés quiere decir salvaje. Frank es tan salvaje que se ve capaz de ponerse de cerca de culebras, serpientes, cobras, tigres, lobos y lo que se le ponga por delante. Desde luego, su especialidad son los reptiles, y por ello el presentador se muestra ciertamente tranquilo en sus cara a cara con los temibles invertebrados.

El capítulo que más me ha gustado hasta ahora es el de "Wild Frank Toros". El aventurero Frank Cuesta se acerca a Coria para presenciar la festividad del pueblo en San Juan. En ella descubre que al toro no se le trata mal, pero rechaza la cruel muerte final del pobre astado.
En este amplio reportaje, el leonés trata de ser comprensivo con los habitantes extremeños y se comporta como un juerguista más hasta que presencia el hecho final. Obviamente, no le hace ninguna gracia el asesinato del toro, y es que los animales son sus grandes amigos.

Muchas veces queremos convertirnos en él para acariciar a todos esos animales que se va encontrando por el camino, aunque ese riesgo solamente sabe afrontarlo él, pues es todo un experto de la materia.

El salvaje documental ya afronta su cuarto año en antena y también cuenta con otros capítulos especiales que hacen de "Wild Frank" uno de los "docudramas" más interesantes de la televisión nacional. Podéis verlo por D-Max, y os aviso que es de los que enganchan.

Con esas pintas y una personalidad que le hace parecer Jim Carrey en "Ace Ventura", Frank le da un  toque especial a su serie tras trabajar en otros espacios sobre naturaleza. Ahora solo le queda dar continuidad al espectáculo.
Lo malo es que su sinceridad le ha hecho perder un buen número de fans en antena. Su rechazo al mundo de los toros y sus comentarios en Twitter contra el independentismo le ha convertido en noticia más de una vez. Está claro que la política no lleva a ninguna parte, aunque en lo de su rechazo al mundo taurino estoy de parte de él.

En "Wild Frank" podemos ver de cerca todo tipo de animales, como estos graciosos canguros.

- El amor por el reino animal puede hacer que "Wild Frank" os resulte interesante, si no es así, difícil será que os guste. Wild Frank es uno de los documentales que más me han entusiasmado en los últimos años, y gran parte de mérito tiene la figura que representa Frank Cuesta, un tipo que sabe lo que hace.

Desde aquí os invito a que veáis algún capítulo de este interesante documental. Yo ya me he tragado unos cuantos como para poder evaluar su contenido. Para mi supera el aprobado, no me cabe ninguna duda.


El precio justo.



- ¡AAAAAAAA JUGAAAAAAAAAR!. Con esta frase daba entrada a los concursantes de "El precio justo" Joaquín Prat, uno de los mejores presentadores que hemos visto en la televisión española. Él fue siempre la cara de este concurso televisivo, que contó en ocasiones con distintos directores y guionistas.

En los primeros días del mes de febrero de 1988 nació "El precio justo", basado en el concurso norteamericano "The price is right". Bob Stewart fue el culpable de que este espacio fuera visto por millones de espectadores, siendo en nuestro país uno de los mejores vistos cuando tan solo contábamos con dos canales de televisión en la mayoría de los hogares. Algunos ya contaban con las nuevas antenas que permitían ver otros canales que barrieron a TVE con el paso del tiempo.

Joaquín Prat dirigió los cinco años del programa.
- Las bases del concurso eran muy sencillas, a la par que entretenidas. Mediante correo ordinario, el programa iba citando a varias personas que acudirían al plató para posiblemente ser llamadas a participar.
El notario seleccionaría a esas nueve personas que entrarían en la participación semanal. Inicialmente se enfrentaban cuatro y Joaquín Prat popularizaba con sus entradas el famoso ¡a jugar!.
Con la salida de un ganador entraría el siguiente concursante, y todos ellos pujarían por aproximarse (eso sí, sin pasarse) al precio justo de cada producto presentado por la voz en off. Si Fernando Acaso presentaba un entonces novedoso reproductor de vídeo VHS, los concursantes publicaban las cercanas cifras. Ejemplo: Isabel (50.000), Sergio (50.500), Paula (65.000) y Marcos (63.000). Acto seguido, Prat desvelaba el real valor del producto -unas 69.000 pesetas-, por lo que Paula sería la ganadora de la ronda.
De esta manera, seis participantes eran los que optaban al escaparate final, pero los tres perdedores no quedarían sin premio, puesto que para ello estaba la prueba denominada como "Escalera de premios".

En la prueba recién citada, Joaquín Prat sacaba su vena más campechana. Aquello lo recuerdo como lo más entretenido por las risas que me echaba. Las azafatas lanzaban una carta, pero la primera era el premio seguro. Con esa carta que portaba un dinero, había que sacar una siguiente apostando por un valor mayor o menor. Si el concursante acertaba seguía participando, aunque la salida del comodín le daría el paso directamente.

Siempre quedaba la opción de plantarse para irse con un dinero a casa, pero ahí surgía la cara campechana de Prat, quien trataba de convencer al jugador para que éste no abandonara. La parte más cruel de esta prueba venía cuando el jugador que se había plantado y Joaquín le hacía seguir para ver que hubiera pasado en caso de continuar. Algunos quedaban bien, pero a otros les quedaba cara de tontos al comprobar que se hubieran llevado mucho más dinero.

Los seis que habían pasado a las fases finales se enfrentan en unas pruebas parecidas a las de la primera fase, pero en dos rondas. Los ganadores de ambas rondas pasarían a la gran final tras aproximarse o acertar el precio justo.

Entonces llega el gran derroche final. Los dos vencedores se ven las caras en una final que incluye dos escaparates de varios lotes carísimos: viajes, coches, apartamentos, motos y electrodomésticos de alta gama, entre otros grandes premios.
Cada concursante elige un escaparate por el que pujará, y como viene siendo la base del programa, cada cual da su precio. Si ambos se pasaban del valor se iban de vació y, si no, el que más se acercaba al precio de su lote, se llevaba uno de los premios a elegir.

De esta manera se celebraba este exitoso concurso semanal que se emitió en España entre 1988 y 1993. Acaparó gran audiencia y contó con famosas azafatas como Verónica Mengod, Arancha del Sol, Beatriz Rico o Yvonne Reyes.

"El precio justo" se emitió entre 1988 y 1993, ofreciendo su mayor premio en 1991.

- Pese a que la idea de los realizadores era seguir con el concurso a partir de 1993 y de forma diaria, finalmente no se llevó a cabo el proyecto y Don Joaquín Prat continuó sus andanzas televisivas presentando un año después "¿Cómo lo veis?". Al año siguiente, el inolvidable presentador valenciano fallecería y "El precio justo" desaparecería con su nombre quedando en la memoria de los más nostálgicos.

Fue uno de los concursos que más me gustaron, de los que pretendía no perderme una sola entrega. Todos tratábamos de acertar las cifras con los participantes (sin pasarnos del precio justo). A ver si ahora acertamos todos con la nota justa de este show televisivo. La mía es de 10.



miércoles, 21 de noviembre de 2018

Cuéntame cómo pasó.



- Hace tiempo que quería hablar sobre esta serie y ya de paso puntuarla como se merece. La gran puntuación dependerá del resto de lectores. Es una de las series más exitosas en la larga historia de la televisión nacional, un enorme trabajo realizado por Miguel Ángel Bernardeau, creador de este espacio para los más nostálgicos.

Precisamente es la vena nostálgica la que despertó gran interés entre los diferentes espectadores de todas las edades, aunque son los más mayores los que más se sorprenden con este viaje al pasado en forma de obra televisiva.
En un principio, la serie iba a llamarse "Nuestro ayer", pero finalmente se optó por dar honores al grupo musical de Fórmula V denominándola "Cuéntame". En 2002 se alargó el título a "Cuéntame cómo pasó" por los polémicos plagios de un título ya registrado.

Carlitos, el pequeño cansino de los Alcántara.
- "Cuéntame cómo pasó" recoge un amplio elenco de grandísimos actores, unos principales y otros no: Imanol Arias, Ana Duato, María Galiana, Ricardo Gómez, Pablo Rivero, Irene Visedo, Paula Gallego, Manolo Cal, Carlos Cuevas, Ana Arias, Juan Echanove, Tony Leblanc, Elena Rivera, Santiago Crespo, Silvia Espigado, Pere Ponce, Paloma Bloyd, Fernando Fernán Gómez, Enrique San Francisco, Lluvia Rojo, José Sancho, Aída Folch, Roberto Cairo, Alicia Hermida, Rosario Pardo... Igual paro, ¿no?. El caso es que todos esos actores y muchos más hicieron de esta serie una de las mejores obras realizadas en la historia de TVE, un duradero trabajo que arrancó en 2001 y continúa en antena.
La verdad es que ya perdí el hilo de la serie y dejé de verla porque me he mareado con tanto ir y venir de actores y las coincidencias históricas que han dejado la trama a la altura de las mayores fantasías de Julio Verne. Quizás fue esa la razón por la que dejé de seguir "Cuéntame cómo pasó", pero es una de los mejores espacios de entretenimiento que he visto en mi vida.

He citado a muchos actores, pero los más importantes son los que representan a la familia Alcántara: Imanol Arias, Ana Duato, María Galiana, Ricardo Gómez, Pablo Rivero, Irene Visedo, Paula Gallego. Éstos representan a Antonio, Mercedes, Herminia, Carlitos, Toni, Inés y la pequeña María respectivamente.

La historia va narrada por Carlos Hipólito, un actor que no hace aparición en la serie y que cuenta la vida de los Alcántara como si fuera el pequeño Carlitos. Éste niño empieza siendo la sal de "Cuéntame", pero realmente acaba por agotar al público con sus continuas historias rebeldes y su sosa madurez. Cuanto más mayor, más cansino.

El cabeza de familia (como más se decía antiguamente) es Antonio Alcántara, casado con Mercedes Fernández, a la que cariñosamente apoda "Milano". Ambos forman un matrimonio que refleja todo un romance de fidelidad... hasta que Imanol le pone los cuernos a Ana en un capítulo.
Antonio es un incansable trabajador que siempre camina a la sombra de "Don Pablo", un tipo facha y sin escrúpulos que le lía más de una. Mientras, el personaje de Mercedes va evolucionando y pasa de ser una simple ama de casa a una empresaria de gran éxito.

Luego tenemos a Herminia, madre de Mercedes. Esta posee un papel de peso en la serie, aunque su mirada de continua desconfianza da hasta miedo en ocasiones. Los otros hijos son Toni e Inés. Uno no para de meterse en líos asociados a la política, y la otra es toda una pesadilla para la familia que simula ser un ente libre que va a su rollo.

Los demás personajes son amigos y familiares cercanos que residen en el ficticio barrio de San Genaro, del que la familia huye en ocasiones para veranear en Sagrillas. Los personajes más destacados son los de Paquita, Karina, Miguel Alcántara, Desiderio, Cervan, Clara y Ramón, entre otros.

Como ya he dicho, es una serie para nostálgicos, aunque a veces aburre con la idea de que algún personaje esté en medio del 23-F, episodios de la ETA y los GAL o en el mismísimo atentado de Luis Carrero Blanco.
Por lo demás, da gusto darse un baño en aguas pasadas, ver coches ya antiguos y otras reliquias del ayer. Da gusto volver a vivir pasadas fechas navideñas u otras festividades que parecen ser mejores con el paso de los años. Gracias a "Cuéntame cómo pasó" podemos dar un viaje al pasado sin la necesidad de usar un moderno transbordador.

Vemos a los Alcántara dentro de su vehículo arropados por sus vecinos de San Genaro. 

- Creo que muchos estarán de acuerdo conmigo en que esta serie es una de las mejores vistas en la historia de la televisión española. Por ponerle un pero, quizás dieciocho años ya sean muchos para marear la perdiz con nuevos personajes e historias no tan atractivas.

Tal vez la solución para Miguel Ángel Bernardeau sea poner un final emotivo a su obra con un bonito mensaje de Carlos Hipólito. Si esto hubiera ocurrido antes mi nota habría sido de diez, pero lamento no poder llegar al sobresaliente, pues como se suele decir... "lo mucho cansa y lo poco espanta".


VALORACIONES DEL ESPECTADOR